¿Qué hubo detrás de esa cara angelical y sus obras maestras en el cine y teatro?
Con motivo del documental definitivo sobre Audrey Hepburn, Más allá del icono, que el próximo miércoles estará a la venta en DVD, la estrella más humanitaria de Hollywood y, también, de la moda. Belleza única en su generación y estrella legendaria de la época dorada de Hollywood, su estilo continua siendo una fuente de inspiración. Pero ¿quien era la verdadera Audrey Hepburn? Esta película devuelve a la vida a esta mujer extraordinaria que se erige como testigo del poder del amor y del perdón.
Si buscamos en wikipedia Audrey Hepburn, nos salen sus logros así: Después de actuar en varias películas británicas y protagonizar la obra de Broadway de 1951 Gigi, interpretó el papel principal de Roman Holiday (1953), el cual le valió un Oscar a la mejor actriz. Más tarde actuando en películas de éxito como Sabrina (1954), The Nun’s Story (1959), Breakfast at Tiffany’s (1961), Charada (1963), My Fair Lady (1964), etc.
Éxitos, una gran belleza, Hollywood, Broadway… pero no es eso de lo que os voy a hablar, no.
Infancia y adolescencia durísimas
Audrey Kathleen Ruston nace en Bruselas el 4 de mayo de 1929. Fue más conocida artísticamente como Audrey Hepburn. Actriz, modelo, bailarina y activista de la época dorada de Hollywood.
Durante su juventud, Audrey sufrió la Segunda Guerra Mundial, primero en Bélgica y luego en los Países Bajos, de donde era originaria su madre. Para evitar que sus orígenes ingleses se revelaran, la madre de Audrey la llamaba Edda Van Heemstra, como ella, y la obligó a hablar holandés.
Audrey hablaba perfectamente inglés, francés, holandés e italiano, un poco de alemán y también de español. Estudió para ser bailarina, pero la mala alimentación durante la guerra hizo estragos en su constitución, así que, pese a seguir estudiando y practicando, se vio en la obligación de elegir una nueva profesión, que fue la de actriz.
Durante el invierno de 1944 los alemanes confiscaron los alimentos y combustibles de la población holandesa. Sin comida ni calor en los hogares, la gente moría de hambre y frío en las calles. Hepburn y muchos otros hacían harina a partir de tulipanes con los que podían cocinar galletas y tartas.
Horrores de la guerra
Su tío y un primo de su madre fueron fusilados como miembros de la resistencia, su hermano Ian fue capturado y estuvo en un campo de trabajo. Las carencias alimenticias se hicieron patentes y Hepburn sufrió anemia y problemas respiratorios durante toda su vida. Es una paradoja que estos fueran los causantes de su carismática imagen, muy alejada de los cánones de la época.
En 1991, Hepburn dijo: «Tengo recuerdos. Recuerdo estar en la estación de tren viendo cómo se llevaban a los judíos, y recuerdo en particular a un niño con sus padres, muy pálido, muy rubio, usando un abrigo que le quedaba muy grande, entrando en el tren. Yo era una niña observando a un niño».
Vidas cruzadas con Ana Frank
Audrey Hepburn fue lectora primeriza del libro de Ana Frank, ya que sentía que habían vivido similitudes por la guerra y las dos eran nacidas el mismo año.
En un pasaje, Ana relata cómo habían ejecutado cinco rehenes ese día. Enseguida recorrió un escalofrío en el cuerpo de Audrey, ya que se dio cuenta que podía tratarse con casi toda probabilidad de su querido tío Otto Van Limburg, mencionado en el capítulo anterior.
El padre de Ana Frank, Otto Frank, pidió a Audrey que encarnara a su hija en la pantalla, pero la actriz estaba tan traumatizada con la historia de la judía que dijo que no se veía capaz de hacer el papel. Hepburn afirmó que el drama de Ana era como algo que le hubiera pasado a su hermana, ya que, aseguró, ”en cierto sentido, ella fue mi hermana del alma”.
Inicios
Acabada la guerra, Audrey Hepburn tomó clases de ballet en Amsterdam y ya en 1948 en Londres. Al tiempo, le pregunta a su mentora sobre su futuro y le habla francamente diciéndole que se puede quedar allí todo lo que quisiera porque tenía mucho talento, pero no iba a destacar como primera bailarina nunca debido a su físico extremadamente delgado por las consecuencias de su infancia y también debido a que era demasiado alta para la época (casi 1,70).
Así que decidió seguir con la interpretación. Tras varios pequeños papeles consiguió el papel de Gigi para un musical en Broadway que le supuso el premio Theatre World Award.
El debut
Vacaciones en Roma fue su primer gran éxito.
En un principio se pensó en Elizabeth Taylor, pero una prueba de cámara, en la que ella no sabía que le estaban grabando, dejó impresionado al director William Wyler, que literalmente dijo: » Tiene todas las cosas que busco: encanto, inocencia y talento. Además, es muy divertida. Es absolutamente encantadora. No dudamos en decir que es nuestra chica».
La lista de parteners en sus filmEs es de categoría: Humphrey Bogart (Sabrina), Fred Astaire (una cara con ángel), Maurice Chevalier y Gary Cooper (Ariane), William Holden (Encuentro en París), George Peppard (Desayuno con diamantes), Cary Grant (Charada), Rex Harrison (My Fair Lady), Peter O’Toole (Como robar un millón y…) y Sean Connery (Robin y Marian).
El freno
Contrapuesto a lo que hacen otras celebridades, Audrey empezó a alejarse cada vez más de la pantalla. Desde 1954 comenzó a actuar menos a medida que fue dedicando gran parte de su vida a contribuir con la organización Unicef, como muestra este enlace.
Colaboró con algunas de las comunidades más profundamente desfavorecidas de África, América del Sur y Asia entre 1988 y 1992.
Fue galardonada con la Medalla Presidencial de la Libertad en reconocimiento a su labor como embajadora de buena voluntad de Unicef a fines de 1992. Un mes más tarde murió de cáncer de colon en su casa en Suiza, a principios de 1993, a la edad de 63 años.
Audrey Hepburn sufrió dos abortos. Uno de ellos de una niña con seis meses de gestación. Parte de la tristeza que aparentaba, era su sufrimiento interno de su infancia y sus pérdidas.
Unicef
Una de las cosas que más destacaron en sus últimos años fue la dedicación, por encima de su salud, a las causas del sida o la malnutrición de los niños en todo el mundo.
A través de Unicef, Hepburn dedicó el resto de su vida a ayudar a los niños necesitados en los países más pobres. En Unicef todavía recuerdan su dedicación y entrega a la causa, que databa desde el año 1955 y que, poco a poco, fue ganando peso en su vida.
En 1992, tres meses antes de su muerte y ya desahuciada, Hepburn hizo su último viaje a Somalia, un acto que siempre fue muy agradecido por Unicef y que engrandecía aún más su ya sencilla y humana forma de entender la vida.
Cabe destacar su estatua en la sede Unicef de Nueva York, inaugurada en el año 2000.
Icono
Audrey Hepburn en la actualidad se ha convertido en un icono, con su imagen se han hecho millones de objetos.
Su imagen es mundialmente conocida por generaciones que ni si quiera conocen su trabajo como actriz ni su contribución a las causas solidarias a las que dedicó gran parte de su vida.
Su rostro, estilo e imagen son hoy en día símbolo de elegancia y canon de belleza. Millones de personas la consideran el parangón del estilo y la elegancia con mayúsculas.
Givenchy, el gran diseñador, cayó rendido a sus pies y fue una historia de amor como llevo a este otro artículo. Como anécdota, el diseñador esperaba a la Señorita Hepburn pensando en Katherine, cuando aún no había llegado la cinta Vacaciones en Roma a Francia. Esa noche cenaron y se hicieron inseparables.
Nota del autor
Quiero agradecer a mi hija Jimena la cantidad de información que me ha facilitado, ya que le gusta mucho e hizo incluso un trabajo para el colegio, y se lo dedico a mi cuñado Daniel, su más ferviente admirador.
291