Llega ‘Matrix 4’ a mediados de diciembre y nosotros ya estamos decepcionados de antemano
La primera película de la saga fue un rotundo éxito porque hablaba de nuestro propio inconformismo en la vida y le daba un significado mágico. Todos los espectadores, junto con Neo, tomamos la pastilla roja y nos sumergimos en un mundo nuevo que dejó huella en nuestra sociedad. Era el año 1999 y los efectos especiales eran magia pura ante nuestros ojos. Lo imposible cobraba vida. Desde ese momento palabras como matrix y pastilla roja entraron en nuestro vocabulario y se convirtieron en símbolos para nuestra generación.
Matrix 2
Matrix Recargado (2003) perdió mucho de su encanto: ya conocíamos la parte más interesante de la historia, los efectos especiales y la moda del cuero negro. Pero si nos habíamos quedado con hambre, podíamos repetir un segundo plato de la misma comida que ya habíamos probado. Les perdonamos la avaricia de no poder dejar ir a la gallina de los huevos de oro.
Matrix 3
Matrix Revoluciones (2003) fue directamente mala. Aburrida y por momentos no sabíamos si estábamos viendo esta saga o alguna otra versión de la interminable Terminator. Sus creadores se acercaron demasiado al sol y cayeron estruendosamente. Como ya no había historia que contar, creyeron que podían deshacer el camino recorrido y que nosotros lo íbamos a aceptar. No fue así. Matrix parecía haber muerto en la desgracia, y con su fracaso ganamos nosotros, los espectadores, negándonos a que nos vendieran espejitos de colores cuando habíamos visto el oro.
Matrix 4
Dieciocho años más tarde, aparece Matrix Resurrecciones (2021) ¿De verdad no tienen una sola idea nueva en todo Hollywood? En el avance Neo olvidó todo lo que vivió en la matrix y se ven un exceso de referencias a Alicia en el País de las Maravillas y Alicia a través del espejo (una sola idea original les pido… ¡una!), luego escenas que parecen copias de las películas anteriores. El problema que enfrentan los productores es que nosotros no nos olvidamos de nada. Salvo que esté pensado para las nuevas generaciones, las que no habían nacido cuando la única película realmente sorprendente de la saga se estrenó en los cines y los que sí la vimos, fuimos descartados como público.
Conclusión, todavía no se estrenó (llega a mediados de diciembre), todavía no la vi, pero ya estoy decepcionada de antemano.
Lo bueno: la esperanza sin límite de los productores.
Lo malo: todo lo demás.
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